NOMBRE COMPLETO | Rafael Prado FRAGUAS | |
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FECHA DE NACIMIENTO | 2 de enero de 1957 | |
LUGAR DE NACIMIENTO | Ourense | |
DEMARCACIÓN | Lateral izquierdo | |
CLUB DE PROCEDENCIA | Atlético de Madrid | |
TEMPORADAS EN EL CLUB | - | |
PARTIDOS | Solo amistosos | |
GOLES | - | |
CLUB DE DESTINO | - | |
EQUIPO ACTUAL | Retirado |
Conocido en el mundo del fútbol
por su segundo apellido, Fraguas ya había sido internacional juvenil en 5
ocasiones con España antes de debutar con el Atlético de Madrid en competición
oficial.
Con apenas 18 años, Luis Aragonés se vio en la
necesidad de contar con el joven defensa de origen gallego ante las lesiones de
Eusebio y Benegas y las sanciones a Heredia y Panadero Díaz. Era la parte final
de la liga 1974-75, y nuestro protagonista tuvo que debutar jugando fuera de
posición, para adaptarse a las necesidades del equipo rojiblanco.
Pese a que su estatura no parecía
la más adecuada para ocupar el puesto de defensa central, donde hay que pelear
muchos balones por alto, Fraguas se desenvolvió perfectamente.
Demasiado joven todavía, sin
contar demasiado todavía en las alineaciones, pese a su juventud, pronto contó
con varios títulos en su haber (una liga, una copa y una intercontinental).
Pero en febrero de 1976, la mala
suerte se cruzó en el camino del joven defensa ourensano.
Fue un 8 de Febrero, en el
Helmántico, con el cartel de “no hay billetes” colgado en las taquillas del
Fondo Norte del estadio, nueve millones de pesetas recaudados, más de 100
autocares atléticos desplazados y en la vigésimo primera jornada de la segunda
temporada de la U.D .Salamanca
en primera división; cuando el todopoderoso Atlético de Madrid de la época, con
los Pereira, Leal, Reina, Ayala, Leivinha y el joven Fraguas, se presentó líder
aquel día en tierras charras para medirse a un equipo, el blanquinegro, que por
aquel entonces miraba a los ojos a los grandes en sus duelos directos, desde su
posición tranquila en la media tabla de la clasificación.
Partido bronco por ambas partes a
lo largo de los noventa minutos, dirigido por un desbordado Sr.Carreira Abad,
que mostró ocho tarjetas blancas (no fueron amarillas hasta la temporada
siguiente), a Juanjo, Robi, Rial, Pérez, Reina, Bermejo, Leal y Laguna; bajo
una caldera en forma de Estadio Helmántico, que presenció un partido de
aquellos de los de antes, en el que las alternativas en el marcador y la
brusquedad del juego hubieran quedado en anécdota a no ser por lo sucedido en
el minuto quince de la primera mitad.
En un balón al que llegaron
juntos el defensa y joven promesa Fraguas (19 años en aquel momento) y el
charro Santiago Rial, éste, en una zona próxima a la línea de medios cerca del túnel
de vestuarios en la que en aquel momento era la banda izquierda salmantina,
impactó con su suela bruscamente sobre la pierna derecha del orensano jugador
del At.Madrid, resultando éste gravemente lesionado con fractura de tibia y
peroné, en un lance en el que el desafortunado trencilla aquella tarde, ni
siquiera señaló falta.
Pocas tarjetas, ocho, para lo que
se vio en el estadio, ninguna expulsión, grave lesión de Fraguas, agresión de
Eusebio a Rial sin balón en juego, trifulca en el descanso en el túnel de
vestuarios entre García Traid y el delegado y un directivo rojiblanco,
conversación entre el arbitro y los dos capitanes en el descanso y opiniones
varias recogidas por la prensa, de los protagonistas del lance:
Santiago B. Rial: “No
sé cómo alguien pudo hablar de intencionalidad, siendo un término subjetivo que
solamente el propio individuo sabe. Si por mi alguna vez hubiera pasado la idea
de entrar intencionadamente a lesionar a un compañero, ya me habría retirado
del fútbol.”
Rafael P. Fraguas: “Fue
un choque como muchos que hay en el fútbol. Fuimos a un balón Rial y yo, y caí
lesionado. Yo sabía que era algo importante, aunque al principio no sentí
dolor”
Aquella lesión frenaría en seco
la progresión de la que parecía una prometedora carrera futbolística. Eran
otros tiempos, y la recuperación de una lesión como esta era difícil, y Fraguas
nunca volvió a ser el futbolista que prometía.
Tras la lesión, tan solo jugó
cinco partidos de liga en cinco temporadas con el Atlético. Tras ocho
temporadas con los rojiblancos, deja el club en 1981.
A finales del mes de julio de ese
año 81, Fraguas vuelve a su tierra, Galicia, para probar suerte con el Real
Club Celta. El club vigués acababa de ascender con Pavic a Segunda A con Pavic,
tras un año en la categoría de bronce.
El técnico yugoslavo tuvo a
prueba al lateral izquierdo, y lo hizo jugar le 4 de agosto de 1981 en un
amistoso que el Celta jugó en el Lourambal de Porriño. Se trataba de un
amistoso en compensación por el traspaso del delantero Chango al Celta.
El Celta venció (1-3), y la
actuación de Fraguas fue bastante destacada, tanto que se llegó a hablar de la
firma de su contrato. Sin embargo, la entidad olívica, consideró que tenía
muchos futbolistas en defensa, y no era necesario el fichaje.
Fraguas no jugó nunca más con el
Celta.
Tras retirarse, se fue a vivir a
Madrid, donde se casó y ejerció la profesión de médico dentista.
*Fuentes (Desde mi grada vieja,
Fameceleste, Faro de Vigo, BD Futbol, El Mundo Deportivo)
1 comentario:
Ante todo gracias de antemano por acordarse de el,a continuación aclarar que el mentiroso de Rial que la entrada no fue fortuita ya que se ha sabido que fue a propósito y que ha día de hoy no se digno a pedir disculpas.una vez más gracias por la noticia
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